Antes de empezar...

Bienvenido seas a este recinto de breves historias. Lee y disfruta un breve momento con un servidor.

23 de junio de 2010

UNA CARTA


Vuela ya, vete volando si es lo que deseas, por mi no te detengas pues ya sabia que esto no duraría. Aun así no puedo evitar sentirme mal, no se como describir este dolor ¿Se puede sentir y a la vez ya no sentir nada? La verdad es que no lo se, simplemente no se ni lo que soy ni a donde pertenezco, ya no soy nada importante. Mi dolor no es nada comparado con el de otras personas, soy como el pequeño grano de arena, si faltó yo no se pierde nada…Y aun así ¿Por qué me siento como el mas desdichado de todos los hombres? Entiendo que mi sufrir es minúsculo junto a otros dolores, pero aun así se que nadie sufre como yo, a nadie le duele algo que ya no siente…Y yo sigo sufriendo por ese dolor…ese dolor que se que ya no puedo sentir por que no existe donde pegue, pero me lastima y me lastima aun mas de lo que me dolía mientras existía esa parte ¿Por qué? ¿Por qué no puedo dejar de sufrir? ¿Es acaso que mi vida esta destinada al dolor y al fracaso? Como saberlo, como saber la respuesta, es como tratar de encontrar la respuesta al por que estamos aquí…

Miró el espejo, no reconozco el rostro que me observa, hace mucho que la expresión feliz que me dabas desapareció, queda solo la mueca, una mueca grotesca de los músculos tratando de recrear una cara que saben bien, jamás podrá regresar…Si, no me da pena admitirlo, acabaste conmigo, acabaste con mi ser y acabaste con mis rastros de esperanza, con lo poco que quedaba para que yo siguiera siendo humano…Ya no lo soy, ya no soy mas que un alma errante, un alma que solo ocupa un cuerpo que esta vacío…

Pero, aun así, quiero agradecerte. Si, yo quiero agradecerte que extendieras el tiempo de vida de un alma que ya estaba muriendo, ambos sabíamos que ya estaba condenada, pero tu la ayudaste a estirar su vida hasta limites inesperados, insospechados para mi…Y para ella. Por eso es esta carta, para agradecerte a pesar de todo, agradecerte todo lo que a esta persona le diste, por desgracia esto desaparecerá después de una semana, en la que se que yo ya no estaré aquí y tu ya la habrás desechado, junto con todo lo que te he dado. Y no es una cuestión que yo imagino, es una cosa que te pido que hagas, cuenta una semana exactamente después de que leas esta carta. Después de esa semana, te pido, te suplico que te deshagas de todos los regalos que te he dado, desde las pequeñas cartas de amor, hasta los collares y anillos que te regalé, no me importa como lo hagas, solo hazlo.

Estas son las ultimas líneas, no solo de la carta, sino de mi vida en si…No trates de buscarme y detenerme, me iré por que se que ya no importo en tu vida, olvídame que eso es lo que deseaste desde un comienzo, olvídate de mi y olvida mi nombre, olvida mi rostro, olvida todo aquello que te enamoró de mi y lo que te fue alejando después…Me despido, me despido de tu vida, tu pensamiento y de esta existencia en si.
Hasta nunca…O ¿hasta luego? Quien sabe la respuesta, quizá yo vaya a un lugar para pecadores, para aquellos que solo el suicidio los lleva ahí. Y tu te iras al paraíso, lo que sea que eso signifique. Si, yo no te deseo ningún mal, al contrario te deseo la felicidad que jamás tuviste conmigo.

Adiós, quizá nos volvamos a ver, o quizá no…

RECUERDA MI ULTIMO DESEO, PERO SOBRE TODO RECUERDA CUANTO TE HE AMADO Y CUANTO TE AMARÉ TODA MI EXISTENCIA VENIDERA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Licencia Creative Commons
Este obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.